No puedo respirar bien y tengo muchas ganas de llorar, aunque esté en público.
¿Por qué, J.? ¡MALDITA SEA! ¿Por qué tuviste que irte? ¿POR QUÉ?
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Acerca de mí
- Navegante Vagabundo
- Soy muy cachondo y por lo mismo evito mostrarme ante el mundo así, siendo yo mismo. No quiero escandalizar, aunque mi vida de por sí sea escandalosa. El hombre de mi vida es O., quien también es mi cómplice de las andanzas. Ambos estamos en la "plenitud de la vida", acabando de llegar a los temidos "treintas". Disfrutamos de todo, a menudo de encontrarnos con un tercero; casi siempre mayorcito de 20 años, con quien compartimos por igual amor y sexo, y quien terminará invariablemente por rompernos el corazón. Me frustra no poder gritar todo lo que tengo dentro y por eso mejor lo escribo. ¿Qué más da si nadie me lee? Yo soy quien soy y sé lo que hago. Todo lo que aquí escribo me ha sucedido y es verdad. La ficción la dejo para la gente con imaginación.
3 comentarios:
he seguido esta historia desde sus primeros días...quiero que termine en "vivieron felices para siempre!!!"
un abrazo man
Hola Navegante:
Lamento haberme ausentado por tanto tiempo de revisar tu blog. La verdad que las ocupaciones particulares interfieren mucho y sinceramente recien el día de hoy estoy actualizandome de cómo va tu vida desde la última vez que comenté respecto a tu episodio de inmensa dicha que vivías con tus dos partners.
Bueno, qué decirte. Muchos de los que te han posteado últimamente tienen toda la razón (sobre todo Castee, que bien parece una enviada del cielo). Aunque nos duela reconocerlo, estos son los riesgos que uno asume al enamorarse de alguien menor (y que en tu caso es además inmaduro).
Es obvio que J. no sabe lo que quiere, sobre todo luego de haber disfrutado de la seguridad que tanto tú como O. le han ofrecido hasta el momento. Y lo mejor que han podido hacer ustedes es dejarlo en libertad. Que él mismo palpe lo que realmente ha dejado atrás y si por último, esa situación tan aparentemente incomoda que vive con su ex, es realmente quiere... aunque suene duro decirlo, pues qué bajo que se valore de esa forma.
Pero tampoco es para satanizar al muchacho. Quizas su juventud misma le impulse a probar estas nuevas sensaciones para ganar experiencia. Pero no estaría de más que por ahí le hagas sobre-entender lo que su ausencia realmente significa para tí. Si con todo ello, J. persiste en sus trece, pues no queda nada más que el tiempo para despejar esta confusa tempestad que andan viviendo ustedes... y ver qué cosa queda al final.
Espero permitas pues mi "insolencia" de opinar sobre este tema, pues de una u otra forma, vivo una situación parecida. Alguien a quien amé mucho (menor que yo, e imaduro para variar) hasta el momento sólo ha esbozado una tibia despedida para conmigo desde el día que le exprese mis más sinceros sentimientos (pues, para su sorpresa, hasta ese momento ambos nos creíamos "heteros").
Ánimo Navegante... recuerda mis palabras. El tiempo es el mejor aliciente para ayudar a comprender mejor las cosas. Recuerda que durante su transcurso, cualquier cosa puede pasar.
Un abrazo y mucha suerte...
castee, mi mensajera celestial, agradezco en verdad tanto tus palabras...
unferth, muchas gracias por tus canciones; la próxima vez que las escuche te recordaré. Veo que no sólo excelentes consejos de sexo sabes dar, en verdad aprecio que te preocupes también por mí.
chaud, mi primer y constante lector: Desafortunadamente esta historia no terminará en "vivieron los tres felices por siempre", no al menos siendo J. uno de los tres (aunque quisiera con toda mi alma que lo fuera); pero sí puedes estar seguro de una cosa: "Navegante Vagabundo y O. vivirán felices por siempre", de eso no me queda duda alguna.
Mauricio, mi buen Mauricio de quien siempre aprecio tus comentarios. Tienes toda la razón del mundo en llamar así a castee, y me he apropiado del título que le has conferido, espero que no te moleste. Yo también sigo tu historia y estoy consciente de cómo te sientes al respecto. Ahora sé cuánto puede doler. ¿Sabes? Yo no había tenido una decepción amorosa en muchos, muchos años. Sólo me he sentido igual por otras dos personas: alguien quien fue mi pareja por 3 años y un chico con quien salí unos seis meses, pero nunca había sufrido tanto por alguien a quien apenas y conocía. Qué rara es la vida, ¿no lo crees?. Por supuesto que no satanizo a J., ni lo haré jamás. Indpendientemente de que haya sufrido por lo que ha hecho es una persona a quien amo intensamente. Tal vez en un futuro (cercano, espero yo) no sea así, pero tampoco lo odiaré ni mucho menos. Sólo puedo esperarme buenos sentimientos hacia él.
Un abrazo para todos.
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